...a realidad!!!
Estoy emocionada y no sé por dónde empezar, lo que sí os puedo asegurar es que esto promete ser una entrada larga, tengo muchas cosas que contar y no me apetece hacer fascículos del día más importante de mi vida, quiero contarlo todo YA!!!
El miércoles 8 a las 20h. ingresaba en la clínica para iniciar la inducción durante la noche con prostaglandinas y ablandar así el cuello del útero. Por la tarde empecé a ponerme nerviosa, no me daba miedo pero no podía creer que de allí saldría con mi niña en brazos. Mis padres no tienen carnet de conducir así que subimos los 3 en el bus con la maletita más cargada de ilusiones que nunca he llevado encima.
El ingreso fue rápido y sencillo, me pusieron las prostaglandinas y me monitorizaron durante 2 horas, todo estaba bien aunque mi situación seguía siendo la misma de hace 5 semanas: cuello cerrado y formado, dilatación 1 cm. A las 2 horas me llevaron a mi habitación, la 731 y allí dormí, mejor dicho, no dormí en casi toda la noche.
Antes de las 9 de la mañana vinieron a buscarme para llevarme a registros de nuevo, monitores y tacto: situación casi la misma, cuello poco ablandado, 1cm. de dilatación y lo que peor veía la comadrona era que la cabeza de la princesa no apoyaba, subía cada vez que la tocaba y así no conseguiría ni borrar el cuello ni dilatar. Siguiente paso: oxitocina, empezaba la fiesta!!!
Según los monitores comenzaron las contracciones más o menos regulares e intensas y yo no notaba dolor alguno, una ligera presión en la panza y un leve dolor de regla, era algo muy pero muy soportable, según la comadrona no es lo habitual pero algunas personas no notamos el dolor. Durante 5 horas estuve enchufada y me hicieron 3 tactos, la situación no variaba: cuello entero, dilatación 1cm., cabeza libre. Me dijo que iba a hablar con mi ginecólogo porque no veía progreso alguno y no tenía mucho sentido seguir así, a las 13.30 aproximadamente me decía que mi ginecólogo había recomendado cesárea y a mí en un principio se me cayó el alma a los pies...pero confío en él y no quise/pude darle más vueltas.
Me dio tiempo de avisar a mi hermano y poco más que venían a buscarme para prepararme, me separé de mi madre para reencontrarme en el quirófano con ella minutos después, por suerte en mi clínica dejan asistir al acompañante durante la intervención. La anestesista me puso la intradural, se pincha en la espalda igual que la epidural pero no dejan catéter alguno ya que tiene una duración suficiente para la cesárea y pocas horas después, te duerme de cintura para abajo. Una vez estaba tumbada con los brazos en cruz, derecha tensión, izquiera vía con goteros y pulso, me pusieron una pantalla y empecé a notar como me tocaban la barriga o qué se yo...sé lo que me explicaban y era que me estaban sondando y que en breve empezaría..."¿Y mi madre?" le pregunté al ginecólogo...a lo que me responde que estaba cambiándose de ropa, que habían coincidido en el vestuario y le había visto en calzoncillos..."Cómo se entere mi padre!!!" le dije...a lo que me responde que él no iba a decírselo...jajjaja... En ese momento entraba mi madre disfrazada de médico, con su mascarilla y todo y se sentó a mi lado derecho, me cogió la mano y me la apretó: "Mi niña, ya estoy aquí y en breve tendrás a tu hija contigo".
Empecé a sentir mucho sueño, le pregunté a la médico anestesista que permaneció todo el rato a mi lado si era normal y si podía llegar a dormirme, me respondió que sí a lo que me puse a dar órdenes: "Si me duermo quiero que mi niña esté con mi madre en todo momento, que haga el piel con piel hasta que yo pueda...", creo recordar que lo pedí varias veces. Empecé a dar arccadas y a tener sudores fríos, pensé que me iba a desmayar...todo lo que sentía se lo decía a la anestesista a lo que ella me explicaba los motivos, parece ser que la intradural produce una bajada de tensión, algo me dijo que hacía y en unos minutos parece que mejoré...mi madre estaba tranquilizándome y limpiando con una gasa mi sudor...en seguida, sin esperarlo aún, escuche un llanto y la voz de mi ginecólogo que me decía: "Aquí la tienes!" y por encima de la pantalla apareció una cosita preciosa, toda blanca y roja, lloraba y de la sangre que manchaba su cuerpo cayó una gota en mi frente que me supo a gloria...y me dijo que la naturaleza es sabia ya que la niña no se encajaba porque llevaba una vuelta de cordón y nudo, que de haber bajado tendríamos que haber salido corriendo. La comadrona la cogió y la trajo a mi lado izquierdo para que la besara, decía que era una rubia preciosa y yo no podía parar de decir: "Mi niña te quiero, mi niña aquí está mamá". Se la llevó para limpiarla en una mesa que había a mi lado, más que limpiarla la vistió, sólo le dejó limpia su carita y en el arrullo se la entregó a mi madre que me la puso cerca de mi cara para que la besara y la oliera...en ese momento, mientras también me cosían, empecé a notar que no podía respirar y le pedí a mi madre que me apartara un poco a la niña que me ahogaba, la anestesista me puso oxigeno y pinchó algo en el gotero, me pidió que no respirará profundo, era peor...con mi mano derecha podía tocar el piececito de mi princesa y era tan pequeñito y calentito...sin darme cuenta estaba ya cosida y venían a buscarme los camilleros para llevarme a reanimación, mi madre salía por una puerta con la niña y a mi me sacaban por otra, en menos de 5 min. estábamos las 3 juntas de nuevo y allí sí pude poner a mi pequeña sobre mi pecho, abrazarla, acariciarla, mirarla, olerla, besarla...la verdad es que fue todo muy rápido, desde que nació mi niña a las 14:37 hasta que estábamos en reanimación no llegó a la media hora, diría que como mucho 20 min. y la princesa en todo momento estuvo conmigo o con mi madre, me encantó el trato de la clínica a un parto con cesárea y aunque hubiese preferido un parto vaginal cuando me dijo el motivo por el que no encajaba su cabecita se me pasaron todas las penas y empecé a disfrutar del regalo que acababa de nacer de mi barriga...
¿Qué os puedo contar de mi niña? Uuuufff...amor de madre...es preciosa, muy rubia, blanquita de piel, 3.620gr y 51,5cm.
¿Qué siento? Pues que aún no me creo que esa preciosidad sea mía y solo mía, llevo casi una semana en casa y sigo en las nubes, la miro y la remiro, la huelo, le busco algo feo y no se lo encuentro, la acarició, le hablo, le canto, la observo, la consuelo, la limpio, le doy masajes, le hago fotos y vuelvo a empezar, no duermo pero no me importa, y no porque ella no me deje ni un minuto para mí...pero es que me cuesta coger el sueño de lo feliz que soy, tengo momentos en los que siento vértigo de la responsabilidad tan grande que tengo ahora, de si seré capaz de hacerlo bien, de no saber qué hacer para calmar su llanto, de sentirme culpable por haberme olvidado de cambiarla después de la toma, o de ir a verla dormir mientras voy haciendo cosas por casa, de sentirme torpe e inexperta...pero me voy a dejar la vida en cuidarla, educarla, amarla, de eso no tengo la menor duda...